El BM (institución que representa
al Club Bilderberg) está empecinado en que sus políticas educativas en el mundo
funcionen a como dé lugar. El mecanismo de “rendición de cuentas” es perfecto
para ello, a través del cual los docentes son sancionados si no ejecutan los
mandamientos del Club. Porque así este diseñe un currículo perfecto para sus
intereses, si los docentes no lo aplican, de nada serviría. Por eso es
necesario obligarlos a trabajar, pero no hablamos del trabajo por el trabajo,
sino del trabajo donde el producto sea el bienestar del Club, no del mundo en
general. Ese es la pelea, la batalla.
Para
ello fue necesario ponerle vallas al docente, el qué es lo que se quiere lograr
en educación, el cómo debe funcionar una institución educativa, el cuál debe
ser el perfil del estudiante y del docente. Esto bajo la óptica del Club por
supuesto.
Esas
vallas son los estándares. “Lo que se mide termina siendo el ‘estándar’
exigido; los resultados, la rendición de cuentas; y la divulgación de estos
resultados, las ‘consecuencias’, las que de hecho premian y castigan las
distintas instituciones educativas” (García, 2006: 133). Las instituciones
educativas, no. Son los seres humanos quienes reciben el premio o el castigo,
finalmente.
La
responsabilidad ha caído por supuesto en los docentes. Estos han sido tratados
casi como enemigos, dado que no quieren trabajar para el Club. En uno de sus
documentos aparece el subtítulo: “presión por rendir cuentas”, donde se puede
leer que “las altas tasas de ausentismo docente en toda la región de América
latina y el Caribe y las observaciones de clases que indican que los profesores
a menudo están muy poco preparados para usar los tiempos de clase de forma
eficaz, son muestra de que las presiones que sienten los profesores para
actuar son muy débiles” (Bruns y Luque, 2014: 42).
Lo
que le interesa al Club no es el ausentismo docente sino que se debe presionar
a los profesores para que su política educativa se hagan realidad y que la
sociedad funcione de acuerdos a sus intereses.
Si el
magisterio no comulga con el pensamiento Bilderberg es necesario doblegarlo.
Ante las amenazas de huelga y rebeldía deben depurar a los “malos docentes”, es
decir, a quienes no aceptan aplicar el currículo Bilderber, diseñados por
especialistas que han sido capacitados (entrenados) por los agentes del Club.
En palabras del presidente mejicano López
Obrador: "Engañaron que iba haber una Reforma Educativa, eso no es una
reforma, no tiene nada que ver con la enseñanza educativa. Es un mecanismo para
someter al magisterio” (2018).
En ese
sentido, algunos países vienen aplicando la evaluación por desempeño laboral,
que no es otra cosa que despido por no asumir el pensamiento Bilderberg. Así lo
plantea el Banco Mundial (Bruns y Luque, 2014: 42): “Entre las estrategias para
reforzar la rendición de cuentas se incluyen medidas para reducir o eliminar la estabilidad laboral docente, aumentar la
supervisión de parte de los directores y empoderar a los clientes (padres y
estudiantes) para supervisar y evaluar a los profesores” (cursiva en la
original).
Por ello se
han implementado diversas normas bajo el discurso de reforma educativa. Así en
Chile, en el marco legal, encontramos el Reglamento
sobre evaluación docente del 30 de agosto del 2004 con 56 artículos y una
disposición transitoria, donde el artículo nueve señala cuatro niveles de
desempeño: Destacado, Competente, Básico o Insatisfactorio. Este último “indica
un desempeño que presenta claras debilidades para el conjunto de los
indicadores evaluados y que afectan significativamente el quehacer docente”. Ese
“quehacer docente” no es otra cosa que estar al servicio del Club. Quienes no
se alinean “dejarán de pertenecer a la dotación docente”. Muchas palabras para
decir despido.
ARTICULO
10: En el caso que un docente
resulte evaluado con desempeño insatisfactorio deberá someterse a una nueva
evaluación al año siguiente de aquel de la entrega de las evidencias que
dieron lugar a la condición de insatisfactorio. Si en la segunda evaluación el
resultado es nuevamente insatisfactorio, el docente dejará la responsabilidad
de curso para trabajar durante el año en su plan de superación profesional con
un docente tutor, debiendo el empleador asumir el gasto que representa el
reemplazo del docente en el aula, y será sometido a una tercera evaluación
anual consecutiva. De mantener el desempeño insatisfactorio, dejará de pertenecer
a la dotación docente.
En México, lo mismo: tenemos el
artículo 53 de la Ley General del Servicio Profesional Docente dado el 11 de
setiembre del 2013 dice al respecto:
En caso de que el personal no alcance un resultado
suficiente en la tercera evaluación que se le practique, se darán por
terminados los efectos del Nombramiento correspondiente sin responsabilidad
para la Autoridad Educativa o el Organismo Descentralizado, según corresponda.
En Colombia, los
agentes del Club nos presentan el Decreto 1278 (19 de junio del 2002) que en su
artículo 36 dice:
El docente que obtenga una calificación inferior al
sesenta por ciento (60%), la cual se considera no satisfactoria, durante dos
(2) años consecutivos en evaluación de desempeño, será excluido del escalafón
y, por lo tanto, retirado del servicio.
En Perú,
tenemos la Ley de Reforma Magisterial, artículo 23:
Los profesores que no aprueben en la primera
oportunidad reciben una capacitación destinada al fortalecimiento de sus
capacidades pedagógicas. Luego de esta capacitación participan en una
evaluación extraordinaria. En caso de que no aprueben esta evaluación
extraordinaria, nuevamente son sujetos de capacitación. Si desaprueban la
segunda evaluación extraordinaria son retirados de la Carrera Pública
Magisterial. Entre cada evaluación extraordinaria no puede transcurrir más de
doce (12) meses.
En los cuatro
casos observamos el mismo fin: despido si no te alineas con el Club. Sin
embargo, para no ser acusado de capitalismo salvaje, los agentes del Club les dan
a los docentes hasta dos oportunidades para convertirse. Así los agentes del
Club posan en las primeras planas como los grandes señores preocupados por la
educación mundial.
En
ese contexto, los docentes peruanos que se han atrevido a mostrar su rechazo contra la reforma educativa del Club, a través de la Huelga Nacional Indefinida 2017
(junio, julio, agosto) y la HNI 2018 (junio), vienen siendo sancionados. Tal es
el caso de los dirigentes Edgar Tello (Lima), Sony Meléndez (Callao) y otros once
docentes en Huamanga. Hay más docentes en proceso de sanción.
***
Bruns, Bárbara y Luque, Javier
(2014). Profesores excelentes.
Washington: Banco Mundial.
García Huidobro, Juan Eduardo
(2006). Políticas educativas de
“rendición de cuentas” y políticas sociales de “corresponsabilidad”. ¿Algo en
común? En Feijoó, María del Carmen y Poggi, Margarita (2006). Educación y políticas sociales. Buenos
Aires: Unesco.